domingo, 25 de septiembre de 2011

Tu carreta en nuestra parada de bus.


Cada día me doy cuenta en mayor medida de como esto solo puede pasar en Andalucía. Aunque soy la primera que expreso mi opinión negativa ante los muchos tópicos que cargamos a cuestas los andaluces, en este caso, solo podía pasar aquí o en una anarquía, que muchas veces convergen en el mismo punto. Proseguiré a contaros lo que me ha sucedido esta mañana. Domingo 25 de septiembre, Torremolinos, característica del día: romería en honor al patrón San Miguel. Una vez aportada esta información continuo con la historia. Como soy enemiga de jolgorios de caseta y farolillo hoy literalmente he huido del coro de gitanillas y carretas. En favor de mi huida decidí con un grupo de amigos dedicar el día al campo, en su estado natural y no edulcorado con sandevid y discos de sevillanas. Como por edad y por recursos no dispongo de más transporte que mis pies o el transporte público, tome la opción de un bus mañanero que me llevara a mi destino. A las 10:00 llegué a la parada habitual de transporte y esperé y esperé y esperé, os preguntaréis que a qué, pues a que un bus pasase como debía hacer. La espera se prolongó, pero mi bus no llegó ni pasó ni nada de nada. La razón única y exclusiva se debe a la celebración de la majestuosa y excepcional romería de San Miguel, por la cual se cortó el tráfico desde antes de las 10:00 h. hasta más de las 14:00 h. a todos los vehículos incluido transporte interurbano público (totalmente necesario y vital para acudir al trabajo o a cualquier otro lugar). Está brillante idea se ha realizado sin advertir en ningún momento mediante una notificación en la parada o por medio de algún agente que se encontraba en las inmediaciones.
He comprobado como se puede excluir a una persona también por no compartir los gustos de un lugar, mermando el tráfico hasta en el transporte público. Hoy los torremolinenses se lo han pasado de lujo, pero a aquellos que les han jodido con una monserga por llegar tarde al trabajo hay se quedan, con la misma mierda de todos los días, sin farolillo, sin vino y sin bus, claro está.

María García
Libertad_gg

1 comentario:

  1. Además de soportar los tópicos de catetos, de ignorantes y de analfabetos, tenemos que cargar con este tipo de cultura (por llamarla de algún modo) que no es otra cosa que la voceadora de la Iglesia y la religión católica. Podemos entender y respetar a los creyentes y participantes de estas fiestas, pero no podemos tolerar -por lo menos yo no tolero- que la cultura se reduzca exclusivamente a eso. ¿Dónde quedan festivales literarios, o de cine, o conciertos? Se hacen, sí, esporádicamente, y con mucho menos presupuesto que el de las romerías y hermandades, y con menos prestigio y con menos apoyo político, y con menos todo. Es deleznable que un candidato se apoye en mejorar las fiestas religiosas del pueblo para ganar las elecciones, por ejemplo. Describes muy bien cómo en este sistema y esta sociedad gana la cultura de la Iglesia y pierden los ciudadanos.
    No puedo dejar de felicitarte por el blog y sentirme orgullosa!

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